Aplicaciones de la Inteligencia Artificial

Los campos más frecuentes donde se emplea la Inteligencia artificial son la robótica y el tratamiento de textos e imágenes. 

En cuanto a robótica se refiere, la inteligencia artificial se centra en el aprendizaje adaptativo, en el que el sistema buscar encontrar diversas formas de obtener un movimiento complejo tal como caminar, correr, jugar diversos deportes, etc. Con el fin de que un robot pueda obtener movimientos naturales humanos, y sea capaz de aprender como si fuera un recién nacido. La inteligencia artificial seria la responsable de realizar los cálculos de aproximación, velocidad, fluctuaciones y medidas de las articulaciones, realizar cálculos sobre el grado de eficiencia y éxito de los movimientos realizados a lo largo del proceso, y la ejecución de diversas acciones para que a través de la experiencia pueda mejorar la realización de tareas específicas. 

En un sistema de diagnóstico clínico, por ejemplo, se pueden partir de imágenes radiológicas y en base a ellas, la IA pueda analizar patrones de enfermedades conocidas, detectar fracturas o anomalías en el cuerpo. 

Uno de los mayores enfoques que tiene el desarrollo de la Inteligencia Artificial más allá de crear humanoides cuya destreza supere al razonamiento humano es crear sistemas capaces de manejar y analizar enormes cantidades de datos de forma rápida y eficiente.